
Manipuladoras de alimentos certifican su oficio al servicio de la infancia en Ovalle y Coquimbo
Trabajadoras con hasta más de 30 años de trayectoria en alimentación escolar vieron reconocidos oficialmente sus conocimientos y vocación, en un proceso impulsado por ChileValora, con financiamiento de SENCE y el apoyo del sindicato de la empresa concesionaria.
Años de esfuerzo, compromiso y vocación fueron reconocidos recientemente a 15 manipuladoras de alimentos de las comunas de Coquimbo y Ovalle, quienes evaluaron y certificaron sus competencias laborales en el ámbito de la alimentación escolar, a través del Sistema Nacional de Certificación de Competencias Laborales, ChileValora, con financiamiento del Servicio Nacional de Capacitación y Empleo, SENCE.
Las trabajadoras, con trayectorias que van desde los ocho hasta más de 30 años de experiencia, han dedicado su vida laboral a una tarea fundamental pero muchas veces silenciosa: alimentar, cuidar y contribuir al desarrollo de niños, niñas y adolescentes en salas cuna, jardines infantiles, escuelas de lenguaje y establecimientos de educación básica y media.
Para las protagonistas, este reconocimiento tiene un profundo significado. Maribel Flores Oróstegui, manipuladora de alimentos de la Escuela de Lenguaje José Martí de San Juan, Coquimbo, y con más de 15 años de experiencia, expresó que “estamos muy contentas por este proceso, agradecidas de la oportunidad que se nos dio. Esto fortalece nuestras competencias para desarrollar de mejor forma un trabajo que hacemos con mucho respeto y cariño hacia los niños. Que nuestro trabajo sea reconocido es muy importante para nosotras”.
En tanto, Marcela Hernández Pastene, manipuladora del Jardín Infantil y Sala Cuna Limarí de Ovalle, con 33 años de trayectoria, señaló que “esto refleja mis 33 años de trabajo. Todo lo que aprendí a lo largo de mi vida laboral hoy está reflejado en lo que me acreditaron”.
La mayoría de las trabajadoras certificadas coincidió en que alimentar a niños y adolescentes conlleva una enorme responsabilidad, y que acreditar oficialmente sus conocimientos otorga mayor valor y reconocimiento a una labor clave para el bienestar y desarrollo de la infancia.
En tanto, para el director regional (s) de SENCE, Eduardo Toro Gallardo, “este proceso de certificación es profundamente significativo, porque reconoce años de experiencia, esfuerzo, dedicación y vocación de mujeres que cumplen un rol clave en la alimentación y el bienestar escolar. A través de la certificación de competencias laborales, buscamos dignificar los oficios, poner en valor los conocimientos adquiridos en la práctica y abrir más oportunidades para que las personas fortalezcan su desarrollo y proyección en el trabajo. Para nosotros, este hito no solo acredita conocimientos, sino que reconoce historias de vida”.
Este proceso de evaluación y certificación, ejecutado por el centro Bureau Veritas, fue posible gracias a la gestión del sindicato de manipuladoras de alimentos de la empresa Merken SpA, concesionaria del servicio de alimentación en establecimientos educacionales en la región, permitiendo que la experiencia adquirida durante años de trabajo pudiera ser reconocida de manera formal y con validez a nivel nacional.
Finalmente, las participantes manifestaron su deseo de que el próximo año se puedan ampliar los cupos, permitiendo que más manipuladoras de alimentos accedan a este proceso y puedan ver reconocida su experiencia y aporte al sistema educativo.
El rol de las manipuladoras
En este caso en particular, las manipuladoras de alimentos preparan, cocinan y distribuyen comidas (desayunos, almuerzos) cumpliendo estrictas normas sanitarias para asegurar la inocuidad, desde la recepción de mercadería hasta el servicio a los estudiantes, manteniendo la higiene de la cocina, y los utensilios, aplicando buenas prácticas de manipulación para prevenir enfermedades y garantizar una alimentación nutritiva y segura para niños y jóvenes, como parte del Programa de Alimentación Escolar (PAE) de Junaeb.
Sistema de certificación de competencias laborales
Cabe recalcar que la certificación de competencias laborales permite que personas que han aprendido su oficio en la práctica demuestren lo que saben hacer, validando conocimientos, habilidades y actitudes adquiridas a lo largo de su vida laboral. De esta forma, este sistema pone en valor la experiencia, fortalece la empleabilidad y dignifica oficios esenciales para la sociedad.
Más información sobre los programas que impulsa el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo, SENCE, en www.sence.cl, y su oficina regional: Gandarillas 810, La Serena, (lunes a viernes, de 09.00 y 14.00 horas).

