
Subsidio Unificado al Empleo: “nuevo instrumento para enfrentar el desempleo y fortalecer el trabajo formal”
La iniciativa de Ley (actualmente en trámite) busca modernizar y simplificar los subsidios al empleo, priorizando la contratación formal de mujeres, jóvenes, personas mayores de 55 años y personas con discapacidad, con especial foco en las Pymes.
Se espera que entre en vigencia durante el primer semestre del 2026, con administración directa del SENCE en todo el país.
El proyecto fue presentado en la oficina regional de Sence Biobío, por la seremi del Trabajo, Sandra Quintana y su par de La Mujer, Camila Contreras, junto al delegado Presidencial Eduardo Pacheco; el director del SENCE Biobío, Daniel Jana; la directora del INJUV, Ximena Jorquera, empresarios e investigadores del Observatorio Laboral del Biobío.
Este nuevo instrumento estatal se propone como herramienta concreta para la creación de empleo formal, especialmente para los grupos que enfrentan mayores dificultades para acceder al mercado laboral y busca unificar los beneficios del Subsidio al Empleo Joven (SEJ), el Bono al Trabajo de la Mujer (BTM) y el Subsidio Previsional para Trabajadores Jóvenes (SPTJ), con foco en fomentar el empleo formal, especialmente entre mujeres, jóvenes, personas mayores y personas con discapacidad.
“SUE se está discutiendo en el Congreso y responde a una mirada concreta del Gobierno por reactivar el empleo en sectores que más lo necesitan. Este instrumento unifica beneficios para facilitar la contratación formal, y esperamos que avance bien en el Congreso para que pueda materializarse en 2026”, señaló el delegado Eduardo Pacheco.
“La región del Biobío necesita más empleo y menos desempleo. Hoy estamos en un 9%, y si bien logramos evitar los dos dígitos tras el cierre de Huachipato, tenemos que seguir avanzando. Este subsidio no solo ayuda a trabajadores, también entrega herramientas al mundo empresarial para contratar con mejores condiciones y seguridad social”, agregó.
La Seremi del Trabajo detalló que el beneficio contempla un aporte mensual de hasta $185.000, dividido en un 20% para el empleador y un 10% para el trabajador, equivalente a un 30% de la remuneración.
“Es un subsidio directo, que no se postula, sino que se solicita, eliminando trámites innecesarios. Su impacto será enorme en sectores históricamente excluidos del mercado laboral, como mujeres que enfrentan barreras de acceso, jóvenes sin experiencia, y personas mayores a quienes les cuesta más reinsertarse”, señaló.
Desde el SENCE, su director regional, Daniel Jana, relevó el rol de la institución en la implementación del subsidio: “Este es un desafío que asumimos con compromiso. Como SENCE, hemos trabajado por años con subsidios al empleo joven y al trabajo de la mujer. Hoy damos un paso más, sumando también a personas mayores y a personas con discapacidad. Esta política hace justicia con cuatro sectores postergados y simplifica el proceso para que accedan sin burocracia, con una plataforma ágil y moderna”.
“Este subsidio no solo beneficiará a trabajadores activos, sino también a quienes hoy no han encontrado oportunidad laboral. Permitirá que las empresas tengan más recursos para contratar y se genere empleo real en la región del Biobío”, añadió Jana.
El empresario Jaime Eriz, gerente general de cadena de Supermercados Beach Market de Tomé, presente en la actividad, compartió su experiencia previa trabajando con subsidios del SENCE: “Esta es una muy buena noticia para el mundo empresarial. Sabemos lo difícil que es contratar, asumir riesgos, y cuando hay un apoyo estatal como este, facilita mucho las cosas. Nosotros hemos tenido experiencias muy positivas con subsidios Sence de apoyo a jóvenes y adultos mayores, con buenos resultados laborales. Que este subsidio llegue pronto, porque las pymes ya estamos planificando el 2026 con estos apoyos”.
El Proyecto Ley
La iniciativa busca modernizar y simplificar los subsidios al empleo, priorizando la contratación formal de mujeres, jóvenes, personas mayores de 55 años y personas con discapacidad, con especial foco en las Pymes.
El Subsidio Unificado al Empleo reemplazará y simplificará tres programas históricos que hoy existen de forma separada: el Subsidio al Empleo Joven (SEJ), el Bono al Trabajo de la Mujer (BTM) y el Subsidio Previsional para Trabajadores Jóvenes. Con este rediseño, se proyecta aumentar significativamente los montos de apoyo, con un subsidio combinado de hasta $185.000 mensuales entre empleador y trabajador, más del doble de los topes actuales.
La iniciativa tendrá especial foco pro-Pymes, permitiendo que empresas de menor tamaño puedan solicitarlo para un máximo de 200 trabajadores por mes, con pagos diferenciados y escalonados que incentiven la contratación formal y la retención.
El proyecto también contempla un límite de duración de 12 meses por beneficiario, centrado en acompañar la transición al empleo formal y permitir la acumulación de experiencia laboral.
Otra de las innovaciones del Subsidio Unificado de Empleo es que contará con flexibilidad normativa, permitiendo ajustes futuros de los parámetros sin necesidad de reformar la ley cada vez que el mercado laboral cambie.